La columna vertebral es el pilar de nuestro cuerpo, la base que nos permite movernos, permanecer estables y nos proporciona agilidad; sin embargo, también es una zona de nuestra anatomía muy vulnerable y altamente susceptible a dolores que pueden repercutir en nuestro día a día.
Frente a estos dolores y molestias que aquejan a la columna, solemos quejarnos y encorvarnos, pero, ¿Sabemos cuáles son y por qué se producen? El tratamiento para la columna vertebral puede ser variado, de acuerdo con un gran número de patologías y, dentro de esta gama de afectaciones, la cirugía es siempre el último recurso.
Cuando de dolores lumbares se trata, el especialista en espalda siempre espera que se puedan tratar los padecimientos no tan graves con analgésicos, reposo y fisioterapia. No obstante, también pueden darse casos en los que se requieran medidas más específicas con antibióticos.
La mejor forma de no llegar a este punto es el sentido común, que nos indica que hay que cuidar la columna mientras seamos jóvenes, manteniendo una buena postura incluso al dormir, para lo cual los colchones memory foam son ideales, así como realizando ejercicio físico con regularidad y previniendo el exceso de peso, que son la causa de muchos de los males más graves que enfrenta nuestra sociedad, como el cáncer y la diabetes, entre otras enfermedades degenerativas.
Las patologías más relacionadas con el dolor en la columna vertebral son:
- Patologías degenerativas. Se producen por el desgaste de las articulaciones como consecuencia de la edad y pueden hacer que ocurra una separación entre los huesos de la columna vertebral, atrapando los nervios y generando dolor agudo. Dentro de los procesos degenerativos, una de las enfermedades más conocidas es la hernia de disco, que se produce cuando se rompe una especie de esponja que permite el movimiento de una vértebra sobre la otra, y un caso similar cuando se produce el pinzamiento del nervio ciático y que requiere tratamiento ciática para aliviar los intensos dolores.
- Patologías traumáticas. Se hacen presentes cuando hay una fractura como consecuencia de un traumatismo, fruto de los accidentes de tráfico, caídas aparatosas, donde la columna sufre el impacto y genera mayor presión sobre la médula. En estos casos se emplea el recurso de la cirugía o un tratamiento de nervio trigémino en caso de que la mandíbula también haya sido afectada.
- Patologías malformativas. Ocurren mientras que el feto se desarrolla en el vientre materno, produciéndose problemas congénitos que dan lugar a una curvatura anormal que recibe el nombre de escoliosis. La segunda malformación más frecuente es la llamada espondilolistesis, que son esos dolores que se producen cuando una vértebra resbala con respecto a la que se encuentra debajo, atrapando a los nervios en el interior.
- Patologías tumorales. Estas enfermedades son tumores que llegan al hueso, como la metástasis, que es la expansión del cáncer en otras áreas del organismo.
Recuerda, cuidar tu columna es mantener tu calidad de vida. Acude a consulta si tienes un dolor de espalda que no cesa con analgésicos comunes y reposo.
