En el post anterior hablamos sobre la demencia senil y mencionamos que la enfermedad de Alzheimer es el tipo más común de demencia senil, por lo tanto los criterios diagnósticos y tratamiento son diferentes en ambos casos.
Demencia Senil – Diagnóstico
No existe una prueba de laboratorio que determine el diagnóstico de demencia senil. Para conseguirlo es necesario el conjunto de análisis clínicos, cognitivos y patológicos. Se pueden realizar las siguientes pruebas:
- Biometría hemática
- Pruebas de función renal, tiroidea y hepática
- Serologías para VIH y sífilis
- Resonancia magnética
- Biopsia cerebral cuyas lesiones para buscar degeneración neurofibrilar, placas seniles y placas neuríticas
Además hay que descartar la presencia de otras demencias como las vasculares, infárticas, Alzheimer, demencia post traumática, multiinfártica, demencia Lewy Body, demencia fronto temporal , demencia asociada al VIH, etc.
Demencia Senil – Pronóstico
El pronóstico de la demencia senil es muy desalentador. La demencia senil constituye la cuarta causa principal de muerte en las personas de la tercera edad, ya que es un trastorno progresivo los síntomas suelen ir aumentando apareciendo poco a poco complicaciones como pérdida de la independencia y la habilidad para tomar decisiones, caídas y fracturas, úlcera de decúbito, contracturas musculares, inmovilidad, infecciones urinarias y de las vías respiratorias, desnutrición, pérdida de la habilidad social y afectiva, cardiopatías, artritis, osteoporosis.
Aproximadamente el 50% de los pacientes albergados en instituciones de cuidado de enfermos crónicos sufren demencia senil.
Demencia Senil – Tratamiento
La demencia senil no puede curarse, sin embargo ante la aparición de uno o más síntomas es muy importante consultar al médico pues con el tratamiento adecuado el progreso puede detenerse. El tratamiento de la demencia senil debe ser integral y estar enfocado en el paciente y sus relaciones familiares.
Hay que establecer una rutina diaria al paciente de manera que pueda recordar los procedimientos diarios de higiene y se pueda disminuir la pérdida de memoria. Las lecturas y visitas familiares son de gran ayuda para estimular la memoria y el reconocimiento de las caras conocidas.
Es necesario tener un ambiente especial para el paciente de demencia senil de manera que no encuentre objetos en el piso con los que pueda caer. Utilizar agarraderas, barandillas, puertas en las escaleras, protecciones en las corrientes de luz así como en las gavetas de la cocina para prevenir accidentes de objetos punzantes.
Seguir al pie de la letra las recomendaciones farmacológicas que brinde el especialista médico así como las indicaciones nutricionales y de actividad física para no forzar al paciente más allá de sus límites. En caso de una demencia senil muy avanzada, agresiones físicas, depresión, desnutrición o psicosis, es necesario la internación del paciente en un hospital.