Las necesidades nutricionales en la tercera edad son muy diferentes a las de la infancia, la adultez media o la menopausia y hay que implementar una dieta balanceada para evitar enfermedades, fortalecer los huesos y aumentar la vitalidad para mejorar estado de ánimo así como la calidad de vida del adulto mayor.Debido a los cambios físicos del adulto mayor las necesidades alimenticias cambiarán también. Los alimentos con origen animal deben disminuir considerablemente y aumentar los de origen vegetal como frutas, verduras y leguminosas.
Los hidratos de carbono constituyen el 55% de las necesidades de calorías del adulto mayor, principalmente de carbohidratos complejos. Los carbohidratos complejos aportan fibra, vitaminas y minerales al organismo; al digerirse se convierten en glucosa de manera que aportan toda la energía necesaria al cuerpo y cerebro. Alimentos como pan, arroz, pasta, legumbres y vegetales contienen carbohidratos complejos.
El consumo de azúcar refinada debe limitarse al 5%, el consumo de azúcar, glucosa o fructuosa debe venir a través de frutas que aportan vitaminas, minerales, sales y fibra. Una cantidad de fibra aconsejable consiste en 30 gramos al día.
Las grasas deben aportar un 30% de la energía diaria, este porcentaje hay que dividirlo en un 8% de alimentos de origen animal que aportan ácidos grasos saturados; 12% de ácidos mono insaturados con el uso y aderezo de alimentos con aceite de oliva. La grasa de origen animal debe reducirse aunque no eliminarse completamente de la dieta; el consumo de colesterol debe ser inferior a los 300 mg al día.
El consumo de lácteos es indispensable para el adulto mayor, de dos a tres raciones al día para el aporte y absorción de calcio. En el mercado se encuentran productos como yogurt natural, yogurt para una fácil digestión, leche sin lactosa, lácteos con lacto bacilos para proteger la flora intestinal que tienen un bajo aporte de azúcar y tienen muy buen sabor.
Las verduras y hortalizas deben consumirse por lo menos dos veces al día, una ración en forma de ensalada cruda y la otra cocida, ambas partidas en piezas muy pequeñas para facilitar el masticado. Asimismo, de las frutas deben consumirse por lo menos tres raciones diarias bien lavadas y desinfectadas, sin cáscara y en trozos pequeños o en aguas de fruta natural endulzadas con muy poca azúcar o miel de abeja.
La dieta del adulto mayor debe ser variada, nutritiva y apetitosa para que no le aburra y la disfrute. Puede dividirse en 5 comidas al día, en general el adulto mayor puede comer de todo excepto lo que tiene prohibido por indicación médica.
Es necesario disminuir la sal en los alimentos del adulto mayor así como las frituras, los alimentos con caldo de las verduras o el pollo son muy recomendables por que se aprovecha al máximo los minerales del caldo, igualmente las verduras y carne cocidas al vapor o a la plancha por que conservan sus minerales y no se pierden en una cocción prolongada.
El adulto mayor necesita ingerir muchos líquidos, aproximadamente de 1.5 a 2 litros diarios. Para conseguirlo es necesario hacer uso de jugos, néctares, aguas naturales o caldos, el abuso en el consumo de café, té o alcohol es dañino para su organismo.
¿Dificultad para masticar?
Si el adulto mayor tiene dificultad para masticar es necesario utilizar papillas, puré, jugos de frutas y vegetales, carne molida, huevos revueltos sin aceite o con aceite de oliva, carne molida, requesón, cereales cocidos (como avena o arroz), budín de pan, etc. Recuerde seguir las recomendaciones de su médico
